Primera Cumbre de las Américas

INFRAESTRUCTURA HEMISFERICA

 

La Cumbre de Miami le dio una gran importancia a la integración hemisférica. Enfatizó el rol de los sectores público y privado para el financiamiento y la creación de proyectos ambientalmente y económicamente viables. Por eso el Plan de Acción de Miami invitó a los bancos multilaterales de desarrollo a trabajar junto con los gobiernos, y cuando proceda, con los grupos privados para desarrollar mecanismos que destaquen temas tales como los de préstamos e inversiones. También alentó a los gobiernos a utilizar otras experiencias regionales y sub-regionales para apoyar el desarrollo de infraestructura.

Se han iniciado grandes proyectos de infraestructura en varias áreas desde la Cumbre de Miami. El Banco Interamericano de Desarrollo (BID), con el respaldo del Fondo Multilateral de Inversión (FMI) y la Cooperación Interamericana de Inversión (CII), ha intentado mejorar las infraestructuras nacionales a través del financiamiento bancario. En los años 1995-1997, el BID otorgó un promedio anual de $1.600 millones en financiamiento. Ambos, el BID y el FMI, han sido importantes para la provisión de préstamos privados y garantías de infraestructura privada sin avales gubernamentales. Han destacado las siguientes áreas de interés: la prevención de contaminación, la conservación de energía, el mejoramiento de transporte, la filtración de aguas, la higienización y el fortalecimiento de entidades y marcos regulativos. El BID también ha organizado varias reuniones ministeriales y conferencias públicas y publicado varios documentos sobre asuntos infraestructurales.

Como ya se ha mencionado, el Grupo del Banco Mundial no es el único activo en el mejoramiento de la infraestructura hemisférica. La Corporación Financiera Internacional (CFI) y la Agencia Multilateral de Garantía de Inversiones (MIGA) también han contribuido a ello. Sin embargo, el primero financia más de $300.000.000 de actividades anualmente. Creó, también, el Grupo Privado para Participación en Infraestructura (GPPI) para encargarse específicamente del financiamiento de infraestructura.

El sector privado también ha aumentado su interés en proyectos de infraestructura, creando numerosos fondos de equidad y quasi-equidad al monto de varios billones de dólares. Éstos incluyen el Fondo Latino de Infraestructura y la Compañía de Confianza Fiduciaria del Oeste. El número creciente de proyectos de infraestructura cuenta también con recursos de fondos de bonos y pensiones para su financiamiento.

Cabe mencionar que la Comisión de Cooperación Ecológica Fronteriza, un órgano entre los Estados Unidos y México que nació del Tratado de Libre Comercio de América del Norte (TLCAN), ha aprobado proyectos hídricos y aguas residuales por más de $260 millones. El Banco Norteamericano de Desarrollo, la Comisión Bilateral de Agua y Fronteras Internacionales, y la Agencia para la Protección del Medio Ambiente de los Estados Unidos han financiado varios proyectos también. Canadá y los Estados Unidos empezaron a implementar el Acuerdo para Nuestra Frontera Compartida en 1995. Éste incluye objetivos de cooperación bilateral para una serie de transacciones aduaneras, la armonización de procesos fronterizos y una distribución más eficiente de los servicios públicos. Los proyectos de infraestructura de energía, incluyendo las aprobaciones para nuevas cañerías de petróleo y gas natural entre los Estados Unidos y México, han resultado en nuevas iniciativas transfronterizas desde la Cumbre. Otras iniciativas para aumentar el comercio transfronterizo que proveniente del TLCAN incluyen la construcción de puentes y puestos de frontera.

En Centroamérica, las reuniones ministeriales han resultado en la aprobación de importantes acuerdos regionales para la implementación del control de cargas, la regulación de tráfico y la preservación de caminos. Fundaciones del sector privado de Honduras y El Salvador, con la ayuda del Banco Centroamericano para la Integración Económica (BCIE) y el BID, también han tenido éxito en la repavimentación de varias autopistas.

Entre las Cumbres de Miami y Santiago, los coordinadores responsables (LINK) buscaron definir más claramente la idea de "infraestructura," ya que la naturaleza general del término cubre un gran número de esfuerzos. Recomendaron que se implementaran varios proyectos ya planeados, que identificaran prioridades y que se trataría de establecer un mecanismo de la Cumbre para el monitoreo de varios proyectos de infraestructura.

[Miami Summit/tracker.htm]