INAUGURACION DE LA XVI REUNION DEL GRIC

DISCURSO DEL PRESIDENTE DEL GRUPO DE REVISION DE IMPLEMENTACION DE CUMBRES (GRIC), EMBAJADOR CARLOS PORTALES, REPRESENTANTE PERMANENTE DE CHILE ANTE LA OEA y COORDINADOR NACIONAL DE CHILE

 9 de marzo de 1999, Santo Domingo, Rep�blica Dominicana

 

En representaci�n del Gobierno de Chile, tengo el gran honor de inaugurar la XVI reuni�n del Grupo de Revisi�n e Implementaci�n de Cumbres (GRIC), que por mandato de los Ministros de Relaciones Exteriores de nuestros pa�ses de Am�rica y gracias a la muy amable invitaci�n del Gobierno de la Rep�blica Dominicana, realizaremos hoy en esta hermosa capital del Caribe.

Nos reunimos en el esp�ritu de consenso y concertaci�n que anim� a nuestros l�deres en Miami y en Santiago de Chile; el mismo esp�ritu que permiti� el acuerdo entre nuestros hermanos de Ecuador y Per� abriendo paso a nuevos y fecundos caminos de cooperaci�n; el esp�ritu que ha inspirado la colaboraci�n hemisf�rica con nuestros hermanos dominicanos y del Caribe, de Am�rica Central y de Colombia para enfrentar los graves desastres naturales que los azotaron en los �ltimos meses; el mismo esp�ritu que - como estoy seguro ser� la conclusi�n de esta jornada - nos ha permitido avanzar muy substantivamente en la ejecuci�n de los mandatos del Plan de Acci�n de Santiago.

Despu�s de la Cumbre de abril de 1998 y para avanzar en la implementaci�n de sus acuerdos ya se han reunido los Cancilleres de los pa�ses del Hemisferio, los Ministros del Interior, los Ministros de Defensa, los Ministros de Justicia y Procuradores Generales, los Ministros de Educaci�n, los Ministros del Trabajo, los Ministros de Salud, los Ministros de Transporte, as� como altas autoridades de los pa�ses de las Am�ricas encargadas del Comercio Exterior, de las Finanzas, de la Lucha contra las Drogas Il�citas, del Fortalecimiento de la Probidad, de la Mujer, de la Ciencia y Tecnolog�a, de las Telecomunicaciones y de la Microempresa, entre otras.

Nos reunimos hoy para revisar los avances en las iniciativas sobre "Corrupci�n", "Prevenci�n y Control del Consumo Indebido y del Tr�fico Il�cito de Estupefacientes y Sustancias Sicotr�picas y Otros Delitos Conexos", "Terrorismo", "Fortalecimiento del Sistema de Justicia y de los Organos Judiciales", "Transportes" y "Telecomunicaciones". Nos reunimos tambi�n, para revisar el funcionamiento de nuestro mecanismo de seguimiento y supervisi�n del avance del proceso y de la cooperaci�n de las organizaciones internacionales involucradas en la implementaci�n de las Cumbres Hemisf�ricas. Nos reunimos finalmente, como encargados por nuestros gobiernos del seguimiento general del proceso, para realizar un amplio intercambio de puntos de vista que permita detectar las m�ltiples potencialidades y los nuevos desaf�os que surgen de una empresa tan vasta y compleja.

El Simposio sobre Fortalecimiento de la Probidad en el Hemisferio, realizado en Santiago de Chile en noviembre pasado, permiti� el intercambio de experiencias entre autoridades nacionales con la participaci�n de organizaciones de la sociedad civil y concluy� con recomendaciones para revitalizar el seguimiento del tema, poniendo un renovado acento en los trabajos que deber� realizar la Organizaci�n de Estados Americanos en �ste tema. Queda todav�a un camino que recorrer para lograr la plena vigencia de la Convenci�n Interamericana contra la Corrupci�n en todos los pa�ses del hemisferio y hay un amplio campo de acci�n para implementar el Programa Interamericano contra la Corrupci�n. Para enfrentar �ste desaf�o los Gobiernos deber�an contar con un mayor apoyo coordinado de los organismos internacionales como la OEA, el BID y el Banco Mundial y vincular sus actividades con las entidades de la sociedad civil interesadas. 

En el cumplimiento de la iniciativa contra las drogas Il�citas, el significativo avance de las negociaciones del Mecanismo de Evaluaci�n Multilateral (MEM) que ha tenido lugar durante los �ltimos meses, nos acerca al umbral de superar las dis�miles y hasta antag�nicas perspectivas con las que se enfrentaban estos problemas, transform�ndolas en enfoques cooperativos para aplicar la Estrategia Antidrogas del Hemisferio. La acci�n de CICAD sigue siendo fundamental en estos esfuerzos colectivos.

En el Compromiso de Mar del Plata de noviembre de 1998, la Segunda Conferencia Especializada Interamericana sobre Terrorismo puso el acento en la intensificaci�n de la cooperaci�n tanto subregional como hemisf�rica y encomend� a la OEA nuevas funciones con �ste prop�sito. Los pa�ses de las Am�ricas hemos planteado nuevos desaf�os a la Organizaci�n.

La semana pasada en Lima, los Ministros de Justicia y Procuradores Generales de los pa�ses de Am�rica trataron profundamente los temas de acceso a la justicia; la formaci�n de jueces, fiscales y funcionarios judiciales; el fortalecimiento y desarrollo de la cooperaci�n interamericana; y la pol�tica carcelaria y penitenciaria. Los Ministros avanzaron en el tema del establecimiento de un Centro de Estudios de Justicia en las Am�ricas, que sea capaz de recoger el esfuerzo de instituciones p�blicas y privadas y concitar los apoyos t�cnicos de los organismos internacionales para el perfeccionamiento de recursos humanos, intercambio de informaci�n y cooperaci�n t�cnica entre los pa�ses y el apoyo a los procesos de reforma y modernizaci�n de los sistemas de justicia en la regi�n.

Los Ministros de Transporte, que se reunieron en diciembre pasado en New Orleans, determinaron objetivos y estrategias de una visi�n integradora del transporte en el Hemisferio Occidental, identificando prioridades de acci�n y acordando responsabilidades de ejecuci�n en esos �mbitos. En los avances en esta iniciativa, cuyo cumplimiento es muy importante para facilitar el libre comercio entre nuestras naciones y para mejorar el bienestar de sus habitantes, el apoyo de los organismos internacionales, especialmente de la CEPAL ha sido fundamental.

Finalmente, en la sesi�n de hoy veremos los avances de la iniciativa sobre telecomunicaciones, especialmente los progresos alcanzados en el desarrollo y universalizaci�n de los servicios de telecomunicaciones; en la difusi�n de nuevas tecnolog�as; en los avances en los procesos regulatorios; en el fomento de la funci�n social de las telecomunicaciones; en la promoci�n de la normalizaci�n de la estructura de la infraestructura de las telecomunicaciones; y en la facilitaci�n del comercio de equipos. En estas tareas, las autoridades de telecomunicaciones de nuestros pa�ses cuentan con la Comisi�n Interamericana de Telecomunicaciones (CITEL), organismo t�cnico de la OEA y con el apoyo de otros organismos internacionales.

Estos meses han permitido afianzar una conducci�n de la Presidencia del GRIC consensuada con Estados Unidos y Canad�. Como troica hemos completado una primera ronda de visitas a los altos ejecutivos de los organismos internacionales, fortaleciendo los v�nculos de cooperaci�n para el cumplimiento de los mandatos de las Cumbres. En los pr�ximos meses tenemos programada una cooperaci�n a�n m�s intensa con los responsables de las Cumbres en cada organismo internacional, con el prop�sito de mejorar los canales de informaci�n, coordinar esfuerzos y lograr un continuado compromiso con la ejecuci�n de los mandatos de nuestros l�deres.

Quiero agradecer muy especialmente al Secretario General de la OEA, Doctor C�sar Gaviria, por el esfuerzo de la Secretar�a de la Organizaci�n en la muy activa participaci�n en el proceso de seguimiento de Cumbres y por su personal y constante respaldo al proceso de implementaci�n de los mandatos. La OEA est� avanzando muy r�pidamente no s�lo en su funci�n de ser la memoria institucionalizada del proceso, sino en establecer mecanismos que permitan la informaci�n abierta a los m�s amplios grupos, a trav�s del Internet. La Oficina de Seguimiento de Cumbres - que tiene una estructura �gil y no burocr�tica - est� tambi�n cumpliendo la funci�n de centralizar la informaci�n de las m�ltiples tareas de implementaci�n del proceso de Cumbres que desarrolla la Secretar�a General y otros �rganos, organismos y entidades de la OEA, apoyando a la Comisi�n Especial de Gesti�n de Cumbres Interamericanas del Consejo Permanente. Otro tanto est� ocurriendo con la informaci�n proveniente de las reuniones ministeriales de seguimiento de Cumbres. Se ha logrado as� una mayor transparencia dentro de la OEA y entre �sta y el proceso de Cumbres. Este avance es crucial para mejorar nuestra coordinaci�n del proceso. La OEA est� estudiando nuevas formas t�cnicas que, de adoptarse, facilitar�an el contacto entre los coordinadores nacionales v�a Internet.

Por encargo de nuestros Jefes de Estado y de Gobierno y tambi�n como resultado de diversas reuniones ministeriales de seguimiento de Cumbres, la OEA tambi�n est� desarrollando tareas de apoyo t�cnico al proceso. Varios de estos cometidos han sido efectuados con rigor y han significado contribuciones importantes para la implementaci�n de mandatos espec�ficos de las Cumbres. Sin embargo, en �ste terreno la necesidad de completar el proceso de modernizaci�n de la OEA - que nuestros propios Jefes de Estado y de Gobierno requirieron en Santiago y que la �ltima Asamblea General aprobara en Caracas - es indispensable especialmente para fortalecer las capacidades profesionales en el Secretariado a fin de apoyar el desarrollo de nuevos temas y sobre todo generar una capacidad t�cnica que permita avanzar en el cumplimiento de los ambiciosos objetivos que se est�n fijando en cada �mbito especializado de seguimiento. As� podr� darse una efectiva convergencia entre el proceso de Cumbres y la organizaci�n hemisf�rica por antonomasia.

Un proceso tan comprehensivo como el de las Cumbres requiere una eficaz coordinaci�n con todos los organismos internacionales que trabajan en estos temas en el hemisferio. Esta coordinaci�n es indispensable para mantener vivos los compromisos se�alados por los Jefes de Estado y de Gobierno en la agenda de cada organismo internacional y para aprovechar mejor los programas que apuntan a objetivos similares o convergentes. Se podr� as� tambi�n evitar mayores costos para pa�ses cuyos recursos fiscales no s�lo son relativamente escasos, sino que est�n cada vez m�s bajo un severo y leg�timo escrutinio de eficacia. De ah� que el trabajo entre el GRIC y su Presidencia con los organismos internacionales, as� como entre los Coordinadores Responsables de cada tema y los organismos internacionales que cooperan en la ejecuci�n de cada iniciativa, ser� determinante en el �xito de un proceso de implementaci�n marcado por ambiciosos objetivos y por recursos escasos.

Finalmente, perm�tanme formular algunas observaciones generales sobre las potencialidades y desaf�os que surgen de �ste proceso. Se ha hablado de una "fatiga de Cumbres": habr�a muchas reuniones y no se ver�an suficientes resultados. La revisi�n que realizamos en octubre pasado en Washington y la que haremos hoy, estoy seguro que demostrar�n que aunque se trata de un proceso ambicioso, estamos avanzando en forma vigorosa. Para el cumplimiento de cada iniciativa se han establecido redes y canales de comunicaci�n en los que participan nuestros gobiernos con el apoyo de los organismos internacionales y as� nos est�n posibilitando abordar los principales desaf�os que enfrenta el hemisferio. Nuestra tarea como GRIC es colaborar con la eficiencia de �ste proceso, conseguir que estas m�ltiples redes sean m�s transparentes para los propios Coordinadores Nacionales e incluso sugiriendo a los Cancilleres, si fuere necesario, medidas para mejorar la coordinaci�n. La Presidencia est� comprometida a facilitar �ste objetivo.

Que nosotros estemos convencidos de los logros del proceso no es, sin embargo, suficiente. Sabemos de la importancia de un di�logo institucionalizado entre nuestros l�deres, sabemos c�mo los v�nculos personales entre ellos facilitan la cooperaci�n entre nuestros pa�ses y tambi�n la soluci�n de los problemas que puedan surgir entre nuestros gobiernos. Sin embargo, es preciso transmitir estos mensajes a la opini�n p�blica de nuestros pa�ses. Hay un desaf�o de "diplomacia p�blica" a�n pendiente para el proceso de Cumbres. Hemos comenzado, con el apoyo de la OEA, a entregar informaci�n abierta v�a Internet; estamos solicitando a los organismos internacionales que colaboran en el proceso con informes sucintos sobre el seguimiento de la Cumbre "A Un A�o de Santiago" pero tenemos todav�a un largo camino que recorrer para proyectar el proceso a la opini�n p�blica de las Am�ricas.

Quiero insistir en la importancia de la coordinaci�n con y entre los organismos internacionales. El trabajo de estas instituciones con nuestros gobiernos es el �nico camino que permitir� aprovechar recursos financieros existentes y capacidades t�cnicas disponibles para el cumplimiento de los mandatos. En todo caso, la reflexi�n sobre objetivos y recursos es una tarea que debe formar parte del ejercicio de seguimiento y evaluaci�n.

El cumplimiento de los mandatos de la Cumbre va m�s all� de los gobiernos. El Plan de Acci�n de Santiago se�ala los principios de la participaci�n de la sociedad civil en estas tareas de democracia, desarrollo y equidad en las Am�ricas. Debemos continuar dise�ando f�rmulas que incentiven una presencia equilibrada de las organizaciones de la sociedad civil; promover su activa participaci�n en la ejecuci�n de los mandatos de la Cumbre; recoger razonablemente los puntos de vista de la sociedad civil de todos los pa�ses participantes, teniendo en cuenta f�rmulas que faciliten efectivamente el acceso de todos los grupos; y respetando el car�cter intergubernamental de los organismos internacionales. La fuerza de las ideas, el dinamismo del inter�s y del respaldo t�cnico, as� como los recursos - incluso financieros- que surjan de la sociedad civil, ser�n indispensables en el m�s pronto logro de los objetivos propuestos por nuestros l�deres.

El desarrollo de todas las potencialidades de �ste proceso es un desaf�o para el GRIC y es tal vez el principal reto en el camino que nos debe transportar desde el pa�s m�s austral de nuestra Am�rica al m�s septentrional. Estamos seguros que Santo Domingo nos dar� nuevas energ�as para continuar abordando nuestra empresa com�n.

Muchas gracias.

[SIRG/1999/XVI/tracker.htm][SIRG/1999/XVI/tracker.htm]