La Secretaría de Cumbres de las Américas de la OEA participó en el Encuentro CMI-OEA, un espacio de diálogo entre representantes de la Confederación Masónica Interamericana y de la Secretaría General de la OEA sobre los valores democráticos, los derechos humanos y la cooperación hemisférica.
La Confederación Masónica Interamericana (CMI) es una organización que agrupa a las Grandes Logias y Orientes de las Américas con el objetivo de promover la fraternidad, la cooperación y el fortalecimiento institucional entre sus miembros. Fundada en 1947, la CMI trabaja sobre la base de los principios de libertad, igualdad y fraternidad, y fomenta el diálogo y la reflexión sobre los desafíos sociales, políticos y culturales de las Américas, en consonancia con los valores democráticos y de respeto a los derechos humanos.
Durante el evento, la directora de la Secretaría de Cumbres, María Celina Conte, presentó los principales aspectos del Proceso de Cumbres de las Américas, destacando su papel como espacio de concertación entre los jefes de Estado y de gobierno del Hemisferio. Subrayó que uno de los elementos distintivos del Proceso es la participación activa de la sociedad civil y otros actores sociales, quienes pueden contribuir mediante consultas, foros temáticos y diálogos con actores gubernamentales en las distintas fases del Proceso de Cumbres. Estos mecanismos permiten incorporar una diversidad de voces en la identificación de prioridades regionales y en el seguimiento de los mandatos adoptados.
En su intervención, la directora Conte señaló que los principios masónicos de libertad, igualdad y fraternidad encuentran eco en los valores que sustentan el sistema interamericano y el Proceso de Cumbres, particularmente en su impulso a la democracia, la inclusión y el diálogo entre gobiernos y sociedad civil. Destacó que estos ideales, profundamente arraigados en la historia de las repúblicas americanas, han sido pilares del desarrollo institucional de la región y continúan guiando los esfuerzos colectivos en favor de sociedades más justas y participativas. Señaló además que el Proceso de Cumbres, al reunir a los jefes de Estado y de gobierno en torno a una agenda común, refleja ese espíritu de cooperación fraterna y compromiso con el bien común que caracteriza tanto a la tradición masónica como al sistema interamericano.
Con su intervención, la Secretaría de Cumbres reafirmó su compromiso con la promoción del multilateralismo, los valores interamericanos y la construcción de consensos regionales a través del Proceso de Cumbres de las Américas.